¿Sientes que has perdido la pasión dentro de tu pareja? ¿Crees que es una situación irreversible? ¡Nada más lejos de la realidad! Es muy habitual que esto suceda, especialmente cuando se trata de una relación que lleva mucho tiempo de convivencia.
En estos casos, como en tantos otros, el Tantra nos ofrece una explicación sencilla y nos da las razones por las cuales la distancia puede ayudarnos a recuperar la pasión y esa ilusión tan maravillosa que la excitación sexual aporta a nuestras vidas.
El Tantra y el secreto para recuperar la pasión
Para comenzar con este apasionante tema hemos de preguntarnos, ¿por qué perdemos la pasión con nuestra pareja estable?
La realidad es que no hay una sola respuesta porque las causas pueden ser prácticamente infinitas, pero el Tantra nos ofrece una respuesta muy simple que tiene que ver con la energía que fluye cuando convivimos con alguien durante mucho tiempo.
Una de las leyes invisibles que rigen las relaciones de pareja largas tiene que ver con la distancia. Esta ley dice que el crecimiento de la pasión es inversamente proporcional a la cantidad de tiempo que los amantes pasan juntos. Es decir, cuánto más tiempo estás junto a tu pareja, menor será la atracción sexual entre ambos.
¿A que te has sorprendido? Estamos convencidos de que sí, ya que se tiende a pensar que cuánto más tiempo se está con alguien mayor es la conexión. Esto es y no es así. Veamos el porqué.
La convivencia y la pérdida de la pasión en la pareja
A medida que una pareja se siente cómoda, el tiempo que pasan juntos aumenta, así como también su conexión. Empiezan a dormir en la misma cama cada vez con mayor asiduidad hasta que un día deciden que es hora de convivir.
Si a esto le sumas que existen parejas que también comparten su lugar de trabajo o que con el tiempo llegan los hijos y comienzan a convertirse en la prioridad, entonces tenemos la tormenta perfecta.
Y en este punto llegamos al momento en que estar mucho tiempo juntos se convierte en algo natural y hasta en una necesidad, pero la pasión entra en declive y se diluye irremediablemente.
¿Sabías que para el Tantra, el solo hecho de dormir juntos, incluso después de tener una apasionada relación sexual, se convierte en uno de los mayores enemigos de la pasión?
El Tantra nos enseña que las energías de la pareja se entremezclan durante el sueño. ¿El resultado? Se desvanece la polaridad porque la esencia sexual de cada uno se torna más similar la una a la otra. Y, aunque puede causar una sensación de cercanía y comodidad, sin polaridad se diluye la atracción sexual.
Y es que la mayoría de las personas creen que cuanta más cercanía, más amor hay entre ambos. Sin embargo, esta fusión es el peor presagio para el sexo. La realidad es que el erotismo se apoya en la distancia, esto significa que cuanto menor es la distancia que existe entre los amantes, la excitación sexual disminuye.
Esta es una de las contradicciones más habituales que se dan en las relaciones de pareja, buscamos la seguridad que implica la convivencia con esa persona de la que nos enamoramos, pero con el paso del tiempo perdemos la pasión.
Curiosamente, a medida que la confianza, la comprensión, la intimidad y el amor aumentan, la pasión y la atracción sexual se ven indudablemente debilitadas.
Recuperando la pasión: cuando la distancia entra en juego
Aunque parezca lo contrario, en el juego de la pasión, la atracción sexual en la pareja se recupera cuando se puede llegar a introducir la tan necesitada distancia tántrica. No obstante, somos conscientes de que no es un proceso sencillo.
Poca distancia no será útil y demasiada distancia puede crear desafección. Es así que cada pareja ha de encontrar su punto medio perfecto, ese que le permita no solo mantener la relación sino también aumentar el deseo sexual. Hallar la distancia ideal será lo que permita que fluya la energía tántrica.
La pregunta del millón entonces es: ¿cómo introducir la distancia ideal en una relación cuya sexualidad se ha dañado?
Los tres tipos de distancia
Existen tres tipos de distancia, a saber:
● Física: es la más evidente. Programar unas vacaciones separados es una excelente forma de recuperar la pasión. Sin embargo, el efecto no suele durar a largo plazo y entonces será necesario realizar cambios más radicales. El plan ideal sería vivir en casas diferentes, pero somos conscientes de que esto no es nada sencillo, especialmente si hay hijos. En este caso, dormir en habitaciones diferentes puede ayudar perfectamente.
● Emocional: Puede ser muy efectiva. ¿Cómo lograr una distancia emocional? Hay muchas maneras de desapegarse de una persona, pero por dar un ejemplo (no apto para quienes apuestan por las relaciones cerradas) tener una aventura con un tercero puede obrar milagros. Sabemos que no es una solución para cualquier pareja, ya que se trata de una distancia delicada que puede dar por resultado final una separación o divorcio.
● Mental: A nuestro modo de ver esta es la distancia más efectiva, aunque sus efectos sean posiblemente menos evidentes. Se trata de un cambio sutil muy valioso en el caso de que las dos distancias anteriores sean imposibles. ¿Cómo lograr una distancia mental? Pues teniendo un hobby o una ocupación totalmente ajeno a nuestra pareja. Hacer algo que cree cierto misterio en la relación ayuda mucho, especialmente si se trata de algo de común acuerdo y sin crear sospechas infundadas que puedan romper la confianza mutua.
En síntesis, la atracción sexual se pierde en mucha parte porque estamos seguros de nuestra pareja, porque sentimos que son “nuestros”. El solo hecho de perder algo de control sobre el otro y llegar a pensar que puede ser amado o amar a otra persona, ayudará a recuperar la pasión perdida.