Que existen infinidad de mitos alrededor del sexo es algo por todos sabido. De lo que no solemos ser muy conscientes es de que cada uno de nosotros posee su propio mito bien arraigado. Sí, nos referimos a ese que nos empeñamos en defender con uñas y dientes. Y es que esta creencia errónea forma parte de nuestra cultura, con ella crecimos y en ella fundamentamos muchos aspectos de nuestra vida.
Algunos de esos mitos nos hablan de cómo ha de ser el sexo, qué intensidad de placer hemos de sentir o no sentir, con quiénes está bien que nos vayamos a la cama y con quiénes no, con qué género nos hemos de excitar e incluso, cómo debe ser un orgasmo satisfactorio según sea clitoriano, vaginal, mixto, múltiple, peneal o prostático.
A continuación te contaremos qué es un orgasmo y cuántos tipos existen.
¿Qué es un orgasmo?
Lo primero que has de saber es que existen tantos tipos de orgasmos como seres humanos hay en el mundo. Por lo tanto, las sensaciones que puedes obtener al llegar al
clímax son imposibles de describir. No obstante, sí podemos definir el orgasmo desde el punto de vista biológico.
El orgasmo o clímax es una descarga súbita de la tensión sexual acumulada. Durante el orgasmo se inician una serie de contracciones musculares y secreción de fluidos para liberar dicha tensión. También se crean tres hormonas que aumentan la felicidad y contribuyen a disminuir la depresión: endorfinas, dopamina y oxitocina.
Formas de llegar al orgasmo
El orgasmo, observado desde el punto de vista biológico nunca es diferente aunque el medio por el que se llegue al mismo cambie. De este modo, no se puede hablar de tipos de orgasmos sino de distintas formas de alcanzarlo.
Así es que, cuando se habla del orgasmo clitorial, anal o vaginal, de lo que se está hablando es de las diferentes maneras de llegar a esta determinada reacción del cuerpo y de la mente, es decir, al orgasmo propiamente dicho.
Y si hablamos del orgasmo masculino, sea cual sea la identidad de género del hombre en cuestión, podemos decir que existen dos formas de llegar al orgasmo: estimulando el pene o por medio de la estimulación anal. Es decir, ni siquiera es necesario estimular el pene ni tampoco que el hombre tenga una erección para llegar al orgasmo.
El orgasmo a través de la mente
Si profundizamos un poco más aún, nos encontraremos con que el orgasmo ni siquiera requiere del estímulo de los órganos sexuales. Basta con estimular la mente para obtener uno. Y es que el verdadero órgano sexual está en nuestro cerebro. Te daremos algunos ejemplos de ello.
¿Has visto alguna vez una película pornográfica o leído un libro erótico? ¿Cómo ha reaccionado tu cuerpo en ese momento? No tenemos ninguna duda de que ha reaccionado en consecuencia, humedeciendo tu vagina si eres mujer o causándote una erección si eres hombre.
¿Lo ves? Y esto ha sucedido sin mediar ningún estímulo en tus órganos sexuales. La excitación simplemente ha pasado por tus ojos y llegado a tu cerebro. También has de tener en cuenta que tu excitación dependerá de tus apetencias sexuales. Si lees o ves imágenes de situaciones que te causan placer, sencillamente te excitarás.
La magia de los sueños húmedos
Se denomina «sueño húmedo» a aquel en el que tenemos vívido contacto sexual con cualquier persona, ya sean conocidas o desconocidas.
Estos sueños, que son completamente normales, suelen ocasionar que al despertar nos encontremos con que estamos completamente excitados. Incluso, podríamos llegar al orgasmo dentro del mismo sueño. Y esto, como ves, sucede sin que nadie nos haya tocado físicamente.
El orgasmo a través del masaje tántrico
El principal objetivo de un masaje tántrico no es el de alcanzar el orgasmo, sino el de utilizar el placer sexual como un canal para llegar a conectar con lo Divino. Dicho placer se genera a través de la estimulación que la masajista o el masajista tántrico realiza sobre el cuerpo del masajeado, sin necesidad de tocar sus genitales.
Existen infinidad de ocasiones en que el solo hecho de sentir las manos de un profesional del masaje Tantra sobre nuestro cuerpo, nos puede inducir directamente al clímax.
Resumiendo, la próxima vez que te hablen de que existen diferentes tipos de orgasmos ya puedes decirles que no es así. El orgasmo es solo uno, lo que sí existen son diferentes formas de llegar hasta él.
¿Te animas a explorar alguna forma nueva de excitar a tu cerebro y de venir luego a contárnosla? Estamos convencidos de que descubrirás sensaciones fascinantes que nos encantará conocer y compartir contigo.